Guardamos un secreto
en un rincón que lleva nuestros nombres,
detrás de la armadura,
detrás de los silencios,
detrás de los cristales temblorosos.
Hablamos sin palabras
de abrazos que perduren en el tiempo,
de dormir enlazados,
de un futuro conjunto,
rompiendo los espejos del pasado.
Ponemos nuestras cartas
en esta mesa abierta, boca arriba.
Yo no te pido nada...
tan sólo que me ames,
quizá, como jamás amaste a nadie.
Cuando caiga la noche
y trunques las cadenas que te atrapan,
estaré tras las sombras
aguardando el instante
de alojarme en tus brazos para siempre.
Ana Mª Álvarez © 2012
5 comentarios:
Promesas de amor que nos envuelven en la ilusión, esa ilusión que deseamos sea eterna.
Bonitos versos Ana.
Te dejo un beso.
PD: te invito a que me visites
Mucha meláncolia en tus versos, esperanzas que aguarda tu corazón enamorado... preparando el camino a la felicidad... que se cumplan tus sueños querida Poeta.
Un abrazo en la distancia.sul
Me gustó: ponemos nuestras cartas...
Genial.
Un placer visitarte, espero que te des una vuelta por mi sitio.
Abrazos.
Es simplemente exelente, usted es una gran artista
http://transitandorecuerdos.blogspot.com/
Si quieres entra es un blog mío en donde escribo, y quisiera saber tu opinion. Desde ya muchas gracias
Recuerdos que perduran, letras que cautivan
Poema, Ana, escrito con un ritmo excelente. Me gusta especialmente la última estrofa, en donde presientes la llegada a buen puerto de tus ansias de amores "cuando caiga la noche".
Un saludo.
Publicar un comentario