domingo, 12 de agosto de 2012

Punto y final

Porque ya estoy cansada
de escuchar exigencias y mandatos
que no te corresponden,
y mentiras, mentiras,
de esa imensa mentira que es tu vida.
.
Porque ya estoy cansada,
me niego a regalarte mis palabras,
ya no eres el que impera...
No eres tú quien no quiere:
soy yo la que se niega a hablar contigo.

Porque ya estoy cansada
de oir la misma historia adulterada,
cierro todas las puertas,
los ojos, los oídos y los labios.
Ya no tienes poder para obligarme.

Porque ya estoy cansada
te enterré hace años, ya estás muerto.
Dedícate a cuidarte
-tú sí lo necesitas-
y a adquirir los valores que te faltan.

Porque ya estoy cansada...
Nadie puede obligarme a ver tu rostro,
ya no te pertenezco
porque nunca fui tuya.
Entretente con tus nuevas marionetas.

Porque ya estoy cansada
de tu absurda prepotencia quinceañera.
Me hablarás con respeto
-pues no serás oído-
si alguna vez me digno a escucharte.

Porque ya estoy cansada,
y sigues empeñándote en negarlo,
la vida nos ha dado
lo que nos merecemos:
no llores por la siembra que has arado.

Y es que la vida es justa
poniendo a cada cual donde merece.
Tengo lo que merezco, no lo dudes.
Tienes lo que mereces, ya lo sabes.
Y porque estoy cansada
                         esta es la última
                                                palabra que te escribo.

Ana Mª Álvarez Barroso © 2012